Mecanismo de acción de las vacunas Livacox

El principal método de acción está basado en un simulacro de infección a través la ingestión de ooquistes esporulados vivos, de cepas atenuadas del genero Eimeria, que son contenidos en las dosis de la vacuna LIVACOX®. Una vez en el intestino, los parásitos empiezan su replicación produciendo, por medio de un complejo ciclo reproductivo, los ooquistes no esporulados excretados a través de las heces. Una vez en el ambiente, los oocistos acaban su proceso de esporulación gracias a específicas condiciones climáticas. La ingestión de los ooquistes esporulados por parte de un nuevo huésped cierra y perpetúa el ciclo de vida de estos parasitos.

Cabe recordar que las cepas de Eimeria de LIVACOX® son atenuadas y de menor patogenicidad a comparación con los coccidios virulentos presentes en el ambiente. Tal característica de las cepas vacunales las rinde incapaces de causar un brote de coccidiosis clínica. Las vacunas LIVACOX® incluyen ooquistes esporulados vivos de los coccidios que tienen más importancia económica en la industria avícola.
Los métodos utilizados para la atenuación y la selección se las cepas vacúnales son procedimientos muy complicados que prevén numerosos pasajes a través de embriones de pollos y sucesivas selecciones en aves adultas.

La reducida patogenicidad de las lineas vacúnales son confirmadas a través de pruebas de inocuidad de LIVACOX® que se ejecutan en BIOPHARM por cada lote de producción. En estas pruebas se inoculan en las aves dosis 10 veces superiores a las recomendadas y se analizan, a través de examen necroscópicos, los efectos sobre el intestino que los parásitos, contenidos en la vacuna, han producidos en los pollos.

Una vez vacunada las aves, la inmunidad empieza a desarrollarse entre el segundo y tercero ciclo de replicación del parásito y se perpetúa en el tiempo gracias a una "revacunación" continua que se autogenera gracias a los nuevos oocitos presentes en el ambiente. El contacto constante del animal con el agente infectante mantiene continuamente estimulda la acción del sistema inmunitario. Por esta característica biológica es importante que los pollos puedan siempre entrar en contacto con los ooquistes expulsado en la cama a través de sus proprias heces.

Después de una sola administración, la vacuna induce inmunidad dentro de los 14 días siguiente y durara toda la vida del animal. Siendo la coccidiosis una enfermedad que en natura se desarrolla entre los 21 y 28 días resulta recomendable adelantar lo más posible la edad de vacunación de los pollitos para obtener una cuanto más temprana acción de la vacuna.